Módulos PERC: ¿Por qué son más eficientes que los convencionales?
Las celdas PERC, o Passivated Emitter Rear Cell, han supuesto un notable impacto en el sector fotovoltaico gracias a sus numerosos beneficios.
¿Por qué las características de este tipo de módulos fotovoltaicos pueden mejorar nuestras instalaciones? ¿Cómo funciona la tecnología PERC?
1. La composición de la celda: la clave de su éxito
Habitualmente, una celda fotovoltaica dispone de las siguientes capas:
- Capa emisora: Primera capa de silicio que capta la radiación solar.
- Capa base: Capa intermedia, también de silicio, que se encuentra entre la emisora y la capa de aluminio.
- Capa inferior de aluminio: La más «escondida» de la celda. Es la que capta la última parte de la radiación, que suele ser la luz infrarroja.
A diferencia de estas, las nuevas celdas PERC disponen de una composición diferente que mejora su rendimiento. Sus capas son:
- Capa emisora: Primera capa de silicio que capta la radiación.
- Capa base: Intermedia, también de silicio, que se encuentra entre la emisora y la capa de aluminio.
- Capa PERC dieléctrica pasiva (con contactos de metal y agujeros realizados a láser): No permiten que el excedente de radiación llegue hasta la capa de aluminio trasera.
- Capa inferior de aluminio: Parte más profunda de la celda.
Como podemos observar, la diferencia entre los dos tipos reside en esta capa dieléctrica. ¿Por qué?
En las celdas fotovoltaicas habituales, la radiación que no se utiliza para la producción de energía por las capas superiores se desecha por completo cuando alcanza la capa de aluminio.
En las PERC, la radiación extra rebota en la capa especial y consigue que las capas emisora y base puedan re-utilizar el excedente para continuar produciendo electricidad y incrementar la eficiencia de los módulos.
2. Rendimiento optimizado en entornos de poca luz
Junto a este aumento de la conversión, encontramos que los módulos PERC son incluso más eficientes en entornos de poca luz, nublados o durante las primeras y últimas horas del día, debido a la longitud de la luz que nos llega desde el sol.
Las ondas más estrechas no alcanzan a sobrepasar la atmósfera, siendo el color azul el filtrado en esta capa. Las demás ondas visibles alcanzan la tierra y parte de las no visibles, como son las ondas infrarrojas, también inciden sobre los módulos fotovoltaicos.
Este tipo de ondas son más abundantes durante esas horas o durante días nublados y, a su vez, son las que componen en mayor medida la cantidad de radiación perdida.
Gracias a que las celdas PERC evitan que se desaprovechen, la producción de los módulos aumenta cuando se dan estas condiciones.
3. Menor calentamiento de los módulos fotovoltaicos
Como broche a su gran rendimiento, se ha demostrado que las celdas PERC sufren un calentamiento menor al no alcanzar la radiación la parte del módulo de aluminio.
Por ello, la producción también se ve mejorada gracias a reducir la temperatura de operación, lo que ayuda a mejorar los resultados de conversión de los módulos.
En Saclima disponemos de uno de los mejores módulos PERC, los Jinko Solar Eagle PERC.
Estos módulos alcanzan potencias de hasta 385Wp en modelos de 60 y 72 células y aseguran que podamos conseguir estas 3 ventajas de los módulos PERC en nuestra instalación.
Ya conoces como funciona la tecnología PERC. Ahora, ¿quieres probarla?
Si necesitas asesoramiento sobre qué módulos encajan en tu instalación o más sobre la tecnología PERC, contacta con nosotros aquí o envía un e-mail a info@saclimafotovoltaica.com
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